Evitar la ocupación de viviendas

Evitar la ocupación ilegal de viviendas. Prevención ligada a la detección anticipada

Esta entrevista forma parte de una serie de programas en los que Luis Freijo colaboró con Cadena Ser en una sección llamada «Ser Precavidos».

Consejos para proteger nuestra casa y nuestras propiedades:

 – Luis freijo, ¿qué tal? Muy buenas tardes. 

– Buenas tardes.

– Para hablar un día más de seguridad hemos abordado esas tres capas de seguridad que proponen para proteger nuestras viviendas pero bueno, no es el robo la única amenaza a la que nos enfrentamos ¿verdad?

– Si, desgraciadamente hoy en día existen otras modalidades de delincuencia. Una de las cuales, de las más importantes es la ocupación, es bastante parecida al robo pero sensiblemente diferente.

– ¿Cuál es la diferencia entre entrar a una vivienda para robar o para ocuparla?

– La actuación del ladrón y la actuación del ocupador son básicamente las mismas, es vencer nuestra resistencia física para poder entrar a una vivienda. Lo que pasa es que luego a nivel de tratamiento legal son bastante diferentes; mientras que en el robo se entiende que se allana una morada, en la ocupación lo que se entiende es que se usurpa una propiedad que generalmente no es morada, con lo cual es bastante más difícil luego desocuparles, ellos hacen su morada en nuestra segunda residencia, en nuestra propiedad, y legalmente, sobre todo si ha pasado un cierto tiempo que no está muy definido, es difícil porque se abre un proceso judicial largo. 

– Aunque el tratamiento legal sea distinto, lo cierto es que violan nuestra seguridad. ¿Hay que tomar medidas diferentes a las de robo o sirven las mismas?

– Pues sí. Si fuéramos exigentes con nuestra segunda vivienda igual que con la primera no habría necesidad de adoptar medidas específicas pero generalmente, está claro, que en las segundas residencias no ponemos los mismos medios, entonces, siempre estamos un poquito más de desventaja. Además, la capa de Detección es una capa que no solemos poner nunca, sobre todo en las segundas viviendas, en este caso es la más determinante a la hora de prevenir y evitar una ocupación. 

– Sí, lógicamente. Además, yo imagino que cuenta mucho que no estemos pendientes de esa vivienda, no ocurre aquí en Logroño pero las segundas viviendas que podemos tener, igual en la playa, pasan meses sin que nadie se acerque por allá. 

– Exacto. Una de las diferencias más habituales entre la segunda residencia y la residencia habitual o morada es el entorno. El entorno de la segunda residencia suele ser un entorno no habitado o con muy bajo nivel de habitación, entonces aquí necesitamos potenciar muchísimo la detección, necesitamos enterarnos de que nuestra vivienda está siendo atacada para ser ocupada, en este caso. Esto es lo que nos va a garantizar dar un aviso inmediato a la policía y es lo que puede evitarnos ese largo proceso. Podrían, en este caso, ser desalojados de forma inmediata siempre y cuando se detecte el ataque y la ocupación en tiempo real prácticamente. En caso de viviendas con un entorno más o menos habitado, deberíamos confiar en que ese entorno nos va a dar la voz de alarma, puede hacerse cargo de esa vigilancia natural, avisar a la policía y evitar que el delincuente o el ocupa establezca su morada en nuestra segunda propiedad y a partir de ahí, empecemos el proceso judicial. 

– ¿Esto se puede hacer a distancia? ¿Confiamos en que nos pueda avisar el entorno de esa vivienda, no? Pero claro, si estamos a cientos de kilómetros de esa vivienda, ¿cómo podemos enterarnos de que alguien está en nuestra casa?

– Ahora hay elementos tecnológicos que nos lo permiten. En teoría, podremos hacerlo de forma autónoma mediante centralitas, que no estén sujetas a vigilancia central de recepción de alarmas, que no lleven cuotas o bien, una centralita certificada con central de aviso alarma. En cualquier caso lo que sí que es aconsejable es instalar elementos de detección temprana, elementos de detección externa, tanto en puerta como en ventanas. En este caso, como las segundas viviendas suelen ser de planta baja, chalets, casas de playa… las ventanas  son muy importantes porque los ocupas entran por ellas. Si instalamos elementos de detección en ventanas, puertas o incluso, elementos de detección interior para saber que están dentro de nuestra casa y de forma inmediata dar aviso a policía, nos lo tiene que notificar a nuestro teléfono móvil en caso de ser autónoma o a la CRA en caso de ser certificada. Eso es lo que nos va a garantizar, es la única diferencia. Realmente la resistencia física aquí es menos importante porque en un entorno no habitado ellos van a  disponer de más tiempo y de más ruido para vencer esa resistencia física. Es la detección la que cobra importancia y la que nos puede marcar la diferencia. 

– ¿Cuánto más tiempo dure la ocupación, más complicado será el proceso para desocupar?

– Exacto. La ocupación en cuanto ellos establecen morada el tiempo no ha de ser muy largo, en seguida que se hacen con la casa cambian la cerradura y a partir de ahí, ya tenemos que empezar proceso judicial, eso ya depende muchas veces de trámites particulares de los que yo tampoco tengo demasiada idea. Pero el proceso judicial es muy largo y cuanto más dure, más deterioro sufrirá nuestra propiedad, nuestra casa. Porque ya sabemos todos cómo funciona: entra más gente de la debida, tiran tabiques en muchos casos, pintan… Realmente, no cuidan la propiedad, no es suya, por eso, una ocupación suele ser bastante violenta con nuestros enseres o con nuestra propia estructura de la casa. 

– ¿Qué es lo que os encontráis en ese caso de segundas viviendas? 

– Nos encontramos destrozos terribles. Nos encontramos que lo primero que han hecho ha sido cambiar la cerradura para que el propietario legítimo no pueda acceder y a partir de ahí tiene que empezar el procedimiento y luego ya dentro, una vez que se inicia y se finaliza el proceso una vez que se produce el desalojo, las escenas son realmente brutales. Hay veces que se llevan los sanitarios, los arrancan o los destrozan, se llevan los radiadores, los marcos de las ventanas… Es una guerra en la que no tienen nada que perder realmente. Se trata de prevenirlo porque una vez en ello, una vez iniciado el proceso y una vez finalizado yo creo que ya es una batalla perdida.

– ¿Encontráis un grado de sensibilización más o menos aceptable con esas segundas viviendas por parte de los propietarios? ¿Suelen establecer esas medidas de seguridad similares a las de la primera vivienda o nos descuidamos?

– Nos descuidamos más. Generalmente suelen tratar de tener a alguien de confianza dentro del entorno de su vivienda para que les avise y la vigile de alguna forma. Esto es bastante efectivo, realmente es una cosa que sí que habría que animar a la gente a hacerlo: buscar a alguien de confianza que viva allí en ese entorno y que nos haga de vigilante natural de nuestra casa. Pero además algunas medidas técnicas deberían adoptarse, lo que pasa es que muchas veces la inversión nos parece poco aceptable para el uso que le damos a esas viviendas.

– ¿Qué podríamos trasladar a nuestros oyentes?

– El consejo es muy simple. Para que la ocupación no sea efectiva ha de ser denunciada nada más que se produce, la denuncia ha de ser instantánea, con lo cual detectarla es fundamental. Para eso debemos instalar elementos de detección tanto en puertas como en ventanas o en todo el perímetro posible que sea sensible de ser roto para poder ocupar la vivienda. 

– Pues una semana más con Freijo Avanzando en Seguridad. Luis Freijo gracias y muy buenas tardes.

– Gracias, buenas tardes.