¿Es que no son iguales todos los servicios?
Pues definitivamente no. Ni por precio, ni por confianza.
Cuando acudimos a un servicio de estas características, generalmente estamos sometidos a estrés ya sea por haber sido víctimas de un robo, por sentirnos ridículamente culpables por haber perdido u olvidado nuestras llaves, etc. y no tomamos las decisiones con el sosiego que sería deseable.